Los hijos son, en muchas historias empresariales, uno de los motivos más poderosos que impulsan a los emprendedores a sacar adelante sus ideas de negocio. Y este es el caso de Francia Elena Olaya, quién en 2018 decidió afrontar el no tener empleo y no ver oportunidades laborales en su municipio Puerto Wilches, departamento del Santander, con la creación de un negocio propio al que bautizó “Las Delicias de Francy”. 

Francia aprendió a hacer dulces desde temprana edad, su abuela le enseñó y con el tiempo lo fortaleció con cursos de repostería o la búsqueda de recetas por internet, siempre con el objetivo de crear lo mejor para sus clientes. Por eso, y desde el inicio del negocio, “Las Delicias de Francy” se ha caracterizado por ofrecer sus postres, gelatinas y otros productos de esta naturaleza con responsabilidad y honestidad, lo cual se refleja en la entrega oportuna de cada pedido, así como en su precio justo y una óptima calidad siempre.

En la historia de este emprendimiento, su propietaria ha debido afrontar momentos complejos especialmente en el área financiera, al no tener recursos para adquirir insumos que le permitan producir lo necesario para cumplir con sus clientes. Sin embargo, ese deseo mayor de continuar brindando momentos dulces a través de sus productos, sumado a su motivación de brindar estudio y estabilidad económica a sus hijos, le han permitido encontrar siempre una alternativa para sobrellevar esas circunstancias difíciles y así, no detenerse en su empeño de, en un futuro cercano, tener un local propio y generar empleos para continuar  deleitando a la comunidad, “siento que mi empresa le aporta a la sociedad momentos de alegría y placer al deleitarse con mis postres, gelatinas, flanes y otros”