Artesanías en chaquira checa y medicina ancestral, son el eje de la oferta que Luz Esperanza Chasoy Cuatindioy tiene a través de su “Centro Ancestral SUMA IUAI” en Acacías, departamento del Meta, un emprendimiento cuyo nombre encierra sabiduría Inga: “SUMA” significa bonito, en tanto que “IUAI” es un vocablo que simboliza pensar. El pueblo indígena inga o ingano es el grupo quechua cuyos territorios se encuentran en regiones como Putumayo, norte de Nariño y sur del Caquetá.

Luz Esperanza está convencida de que todos nacen con la sabiduría de la medicina ancestral, solo que no la desarrollan. Para hacerlo, lo aprenden con el “taita” desde pequeños “yo tengo ocho hermanos, pero la única que hace medicina ancestral soy yo”, y ya son trece años ofreciéndola en Acacías, para lo cual utiliza plantas del Putumayo.

A través de su emprendimiento, considera que les aporta a sus clientes alegría y bienestar. Lo primero gracias a sus artesanías -manillas, collares, aretes o bolsos-, pues además atiende pedidos personalizados y lo segundo con su medicina. Empezó con una vitrina de exhibición y hoy en día tiene cinco, así que para 2022 planea tener un local más amplio, continuar creciendo y tener un local propio.